El eterno Femenino-Masculino

 

 

El espíritu del valle es inmortal,
espíritu y valle forman lo Femenino primordial.

La puerta de lo Femenino primordial,
en su continuo abrirse y cerrarse
realiza el abrazo cósmico,
que es la raíz del cielo y la tierra.

Si se atraviesa sin cesar la oscuridad,
se alcanza la luz inagotable,
que nunca deja de brillar.

Tao Te Ching al alcance de todos. Alfonso Colodrón.

Cuando se intenta hacer comprensible una visión filosófica, un despertar espiritual o una cosmogónica -explicación global del cosmos, su origen y naturaleza-, nos encontramos con que las palabras no son números. Con estos, todos pueden resolver problemas y ecuaciones, porque no están sujetos a interpretación. Con las palabras todo se vuelve más difícil, sobre todo si están escritas en tablillas de bambú, si lo están desde hace más de dos milenios y si han sido recogidas de tradiciones orales, a las que se añaden o de las que se suprimen frases enteras que se interpretan y reinterpretan una y otra vez.

Este es uno de los pasajes que ha hecho correr más tinta y que ha dado lugar a traducciones mas diferentes entre sí. Si conecto en aquí y ahora con estas afirmaciones, me surgen imágenes aproximadas para que no queden como formulas esotéricas dedicadas a una élite de sabios y místicos.

Cualquir valle a sido formado por un río que lo fecunda. Sus límites son imprecisos mientras se forma e incluso pueden cambiar según las crecidas o sequías del río. Un valle suele ser llano, estar en lo hondo, tal vez entre abruptos roscos montañosos. Una buena imagen de la calma de lo femenino, de la fecundidad de la madre. A lo largo de los siglos, numerosas ciudades y civilizaciones han surgido de un fértil valle: del Nilo, del Éufrates, del Indo, del río Amarillo... A lo largo del Amazonas y del río Sepic florece aun rica diversidad de culturas y de lenguas.

En un plano más personal, podríamos pensar en la unión carnal entre hembra y macho, entre mujer y hombre. Y podríamos remontarnos a la sexualidad tántrica, en la que el abrazo orgásmico hace desaparecer la dualidad, los opuestos, y reconoce todo a la unidad primordial. Según la tradición hindú, toda mujer es un reflejo del rostro de Sakti -energía-, y todo hombre un reflejo del rostro de Siva -conciencia-, y cuando se unen, solo hay conciencia-energía en movimiento, el Siva Natataja que danza, creando y destruyendo mundos a su alrededor.

El útero es oscuro como cualquier cavidad, gruta y caverna. Pero es de él de donde surge la vida cuando ha sido atravesado y fecundado. Vida que sale a la luz, que ya estaba en su interior.

En un plano más amplio, como hologramas completos que somos del universo, en nuestro interior se halla el vacío sin forma y todas las formas posibles en un continuo proceso de aparición y desaparición, de creación y destrucción, de transformación constante del potencial: surgen los pensamientos, los sentimientos, los proyectos, las ideas e ideales y vuelven a desaparecer lo mismo que aparecieron, pues todo lo que nace tiene que morir y solo lo que nunca ha nacido puede desaparecer. Lo eterno es el proceso de manifestación de las cosas: cuando se reúnen las condiciones necesarias, se manifiesta un fenómeno; cuando desaparecen, vuelven al vacío original o se transforma en otro nuevo.